Y volvimos a El Campito…

Luego de una experiencia buena en Limón y Sal en Arecibo, todavía queríamos escuchar música interpretada en vivo. Fuimos a El Campito en Manatí donde estaba a punto de comenzar la música. El grupo: Libertad del Alma. Excelentes músicos y cantantes, interpretaron las canciones esperadas que se han convertido en himnos de los que seguimos a estos grupos en chinchorreos por la Isla, pero también unos nuevas y espectaculares “covers” de canciones recientes (hasta de Bad Bunny, versión PG).

De antemano sabía lo que pediría: nachos con pollo y Moscow Mule de lavanda. Esto se nos había quedado pendiente en visitas anteriores. El trago, quemado al momento llenó mis expectativas, además es visualmente bello. Los nachos muy ricos, nada que ver con el concepto mexicano que conocemos, solo el nombre y los chips. ¡¡Recomendado!!